Todos sabemos que el entorno digital y especialmente las redes sociales son vivas y cambiantes. Y también imprevisibles. Salvo que seas una marca o usuario con mucha influencia es casi imposible marca la agenda y dejar huella. Pero la magnitud de los canales no debe desanimarnos ya que podemos convertir la espontaneidad de la red en una herramienta a nuestro favor. ¿Cómo? Utilizando estrategias de marketing en tiempo real (Real Time Marketing).

En principio la técnica de marketing en tiempo real se utilizó en eventos, series o en grandes acontecimientos de noticias, donde se podía impactar a la audiencia con alguna acción relacionada con lo que estaban viendo. Evidentemente las redes sociales y el auge de los dispositivos móviles han revolucionado el concepto.

Seguro que la has visto en muchas ocasiones: visuales que usan eventos de referencia, duelos ente community managers o memes salvajes.

¿Cómo podemos montar una buena estrategia de marketing en tiempo real?

La base es sencilla, monitorizar las redes sociales en busca de una oportunidad para explotarla y aportar algún beneficio a la marca. Nunca debemos de perder el foco en nuestros objetivos generales y las estrategia. Si buscamos ventas, notoriedad o generar comunidad tenemos que enfocarnos a esto, aunque lo hagamos en tiempo real.

Una vez hemos detectado una oportunidad, llega el momento clave: ¿actuamos o no actuamos? Esta decisión es fundamental y de nuevo no tenemos que perder foco en lo que estamos buscando. Un buen consejo es esperar un poco para ver cómo se desarrollan acontecimientos. No importa ser el primero si lo hacemos bien, y en ocasiones un evento en redes sociales evoluciona de manera diferente a lo que esperamos.

Pero tampoco debemos dormirnos en los laureles, no hay nada peor que sumarnos a un hashtag cuando ya no está vivo (o un día después). En este sentido es necesario ser muy ágiles. Una vez tomada la decisión de actuar y planificadala acción a realizar (un visual, un vídeo, un comentario), el tiempo de producción es fundamental.

Otro factor a tener en cuenta es la calidad o la espectacularidad. El marketing en tiempo real se ha convertido en una estrategia muy utilizada y cientos, o miles de usuarios, lo hacen de manera natural. Nuestro mensaje debe destacar, ser brillante, diferente o atrevido, pero nunca debe pasar desapercibido. Es lo peor que podemos hacer.

Éxito o fracaso

Puede ocurrir que nuestra estrategia haya sido la correcta pero que no funcione. Como hemos comentado anteriormente, la red es imprevisible y en ocasiones una acción en tiempo real puede volverse contra nosotros. Tenemos una ejemplo real en la campaña que esta semana ha lanzado Ballantine´s España con Manolo Community Manager.

Ficcionaron un despido de su Community Manager (el cual era un personaje ficticio y polémico) aprovechando las semifinales de Champions para conseguir más visiblidad y montando una polémica en torno al Atlético de Madrid y el Real Madrid.. La acción era bastante buena pero no contaron con el factor Twitter y durante una noche entera #boicotBallantines fue trending topic.

¿Merece la pena la visibilidad de esta campaña por el riesgo de tener una etiqueta negativa continuamente? ¿Los millones de usuarios de Twitter saben que Manolo CM es falso? El tiempo lo dirá.

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