Vipnet360 consolida el posicionamiento y reconocimiento de la compañía de telecomunicaciones Adamo con una estrategia basada en la colaboración de Jesús Calleja como embajador de marca.
A pesar de llevar 13 años operando en el mercado español y ofreciendo un producto innovador (fibra de alta velocidad para particulares) la operadora de telecomunicaciones Adamo necesitaba reforzar su reconocimiento de marca y mejorar su posicionamiento para ganar presencia y alcanzar el nivel de sus competidores.
A principios de 2019, Vipnet360 tomaba las riendas de su estrategia digital con el reto de llevar la compañía a otro nivel en cuanto a posicionamiento, conocimiento de marca y reputación se refiere, proponiendo como piedra angular la vinculación de Adamo con una persona influyente que tuviese una gran afinidad con la compañía: Jesús Calleja.
Esta colaboración vino de la mano de una nueva identidad de marca. La compañía no sólo renovó su imagen, sino que adaptó sus productos y estrategia para afianzar su posicionamiento en el mercado español de telecomunicaciones como una compañía cercana, transparente, dispuesta a llegar donde otros no llegan y que ofrece un producto de alta calidad a un precio muy competitivo.
Las redes sociales son un canal de información y comunicación, pero en los últimos años lo son sobre todo de influencia. Según el estudio de redes sociales llevado a cabo por IAB Spain en 2020, un 47% de los encuestados considera que influyen a la hora de hacer la compra de un producto o servicio. Además, el 68% de los usuarios declara seguir a influencers en redes sociales y el 37% declara considerarlos creíbles.
Estas cifras respaldan y justifican la importancia de los influencers en la estrategia marketing de cualquier compañía, y yendo un paso más allá, la importancia de un embajador de marca, una persona que se identifique con los valores de la empresa y se convierta en su mejor promotor.
El equipo de Vipnet360 lo tuvo claro desde un primer momento a la hora de buscar un brand ambassador: Jesús Calleja y Adamo formarían una pareja perfecta. La ilusión del propio aventurero al conocer el proyecto y la vocación local de la compañía de telecomunicaciones nos lo confirmó, y es que el leonés encarna a la perfección la forma de vida por la que apuesta Adamo: vivir en un entorno rural sin renunciar a las ventajas de la digitalización.
Defensor acérrimo de la vida en los pueblos, Jesús decidió volver a su tierra y reside actualmente en Fresno de la Vega, un pequeño pueblo leonés. A pesar de encontrarse en plena naturaleza, la estrella televisiva vive y trabaja conectado al mundo desde su domicilio.
No cabe duda de que Jesús es el embajador ideal para Adamo, consigue dar visibilidad a las personas que como él viven en los pueblos. Juntos, Adamo y Jesús tienen el compromiso de mejorar la vida de quienes apuestan por el entorno rural.
Una vez que el objetivo de la campaña estaba claro y contábamos con la presencia de Jesús como embajador, solo nos quedaba contarle al mundo qué teníamos entre manos.
Necesitábamos un formato con gran poder de comunicación, fácil y que transmitiera los valores de Adamo tal y como ellos los sienten. Contábamos con el testimonio de personas que estaban dispuestas a compartir su experiencia de cómo les había cambiado su vida gracias a la Fibra de Adamo, y por otro lado, teníamos un embajador que es conocido por darle voz a los habitantes de los rincones más ocultos de nuestra geografía. Fue aquí cuando se decidió que el mejor formato era dar visibilidad a estos testimonios a través de vídeo. En todo momento se pensó en piezas cortas que fueran fáciles de consumir, pero que transmitieran al 100% el objetivo de la campaña. Hoy en día la gente está en las redes sociales, y es ahí donde teníamos que estar.
Así, la colaboración entre el influencer y la marca se ha materializado principalmente en varias piezas audiovisuales: el primer programa de la última temporada de Volando Voy, y tres video testimoniales en los que Jesús da a conocer “casos de éxito” de gente que vive y trabaja en el entorno rural gracias a la fibra de Adamo.
Vipnet360 coordinó con Zanskar la grabación del primer episodio de la última temporada de Volando Voy: Valles Pasiegos. Un programa dedicado al despliegue de fibra óptica de alta velocidad en la población cántabra de Alceda, un lugar único para vivir pero donde hasta la fecha “el abandono era total” según sus vecinos y no contaban con acceso a Internet.
Adamo no solo llevó la fibra óptica de alta velocidad a Alceda sino que además con la ayuda de Jesús Calleja, su equipo y un grupo de vecinos comprometidos, transformaron la antigua biblioteca que estaba en desuso en un moderno espacio de coworking a disposición de todos.
La coordinación entre ambos equipos, Vipnet360 y Zanskar no fue sencilla, ya que se produjo en medio de la primera ola de la Pandemia del COVID19 y los planes iniciales tal y como estaban previstos tuvieron que modificarse, pero finalmente y con gran esfuerzo y dedicación de ambos equipos, el resultado ha sido todo un éxito y a día de hoy ya se han publicado varias de estas piezas, las cuales han tenido muy buena acogida por los usuarios de las redes.
Adamo lleva su fibra donde otros no llegan, cambiando la vida de las personas que residen en poblaciones sin acceso a Internet. Junto a Jesús Calleja y su equipo, Vipnet360 ha grabado tres historias que emocionan.
La compañía ha llevado su fibra de alta velocidad a Sobarzo, un pueblo de Cantabria de unos 770 habitantes. Allí Patricia se ha lanzado a abrir su negocio y cumplir su sueño. Es una artista con la ambición de internacionalizar su proyecto Kinesfera Artística desde Cantabria gracias a la fibra de Adamo.
Otra bonita historia es la de Luisa, que gracias a la fibra de alta velocidad de Adamo puede cumplir su sueño de vivir en su pueblo natal de Ourense sin perder el contacto diario con sus seres queridos de Francia.
El tercer caso de éxito es el de Rubén Arroyo, un ingeniero de campo de Energías Alternativas que vive en un pueblo de Toledo sin renunciar a la mejor conexión a Internet más rápida gracias a Adamo.